Aunque la eficacia final del contrato de promesa de venta se concreta al obtener la celebración del acto jurídico prometido, es posible que las partes, además de acordar la prestación de hacer que la naturaleza del contrato les impone, ajusten otras obligaciones propias del negocio jurídico prometido, mediante las cuales persiguen la consecución de algunos de los efectos concernientes a este, advirtió la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia. En efecto, la corporación aclaró que estas prestaciones anticipadas se ajustan más con la naturaleza del contrato prometido y no tanto con la de la promesa que agota su eficacia final en el cumplimiento de una mera obligación de hacer. Por consiguiente, las restituciones a que haya lugar por la resolución de la promesa deben gobernarse por las normas reguladoras de las restituciones mutuas del contrato prometido, cuyo cumplimiento anticipado la origina y con cuya naturaleza se acomodan, sentenció el alto tribunal (M. P. Luis Armando Tolosa)