Uno de los derechos legalmente consagrados para los menores de edad es el relacionado con la recreación o participación en la vida cultural y en las artes que para su ejercicio, de acuerdo con la normativa vigente, deberán estar acompañados por sus progenitores o, en su defecto, por sus cuidadores o tutores. Por lo tanto, indicó el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, los niños no pueden entrar solos a las salas de cine y, por ende, siempre deben estar acompañados de sus padres, cuidadores o tutores, quienes en ejercicio de la responsabilidad parental les brindan la orientación, cuidado, acompañamiento y crianza, además de garantizar la protección que los mismos requieren, toda vez que por su corta edad no se la pueden brindar ellos mismos. La entidad recordó que, en atención al interés superior de los menores de edad, existe una responsabilidad solidaria, conjunta y simultánea en cabeza de la familia, la sociedad y el Estado, en cumplimiento de sus obligaciones básicas, así como la de generar políticas públicas que garanticen y promuevan sus derechos y prevengan amenazas y vulneraciones.