De acuerdo con las inhabilidades establecidas en la legislación contable, no se encuentra una relacionada con un contador público que es revisor fiscal de una sociedad propietaria de un local en mora y, a su vez, es postulado para revisor fiscal de la copropiedad donde está ubicado dicho local. No obstante, deberán revisarse las amenazas descritas en el Código de Ética del anexo 4 del Decreto 2420 del 2015 y determinar si este hecho genera una amenaza para el cumplimiento de las normas éticas y el principio de independencia. De ser así, será necesario aplicar las salvaguardas correspondientes, indicó el Consejo Técnico de la Contaduría Pública. El revisor fiscal deberá analizar el grado de importancia que tiene la entidad propietaria del local frente a los derechos de voto dentro de la copropiedad. En caso de existir derechos de voto importantes, como sería el caso de establecer una mayoría, deberá examinar si existen amenazas relacionadas con la independencia.