Reforma tributaria no será “pupitreada”, aunque tenga mensaje de urgencia

ÁMBITO JURÍDICO y el Departamento de Derecho Fiscal de la Universidad Externado de Colombia realizaron esta mañana el foro Hacia una reforma tributaria más equitativa, que contó con la participaron de expertos tributaristas y de los senadores ponentes de la iniciativa que impulsa el Gobierno.

El primero en intervenir fue el senador Antonio Guerra de la Espriella, quien advirtió que la reforma fue presentada apresuradamente. “Percibo que el tiempo que hay es corto para su estudio y aprobación. El director de la DIAN se tomó dos años para preparar la iniciativa, pero al Congreso, en menos de un mes efectivo, le piden aprobarla”.

En opinión de Guerra, los asalariados que reciben 4,5 y 5 millones de pesos no deberían estar sujetos al impuesto sobre la renta, lo implicaría subir el límite de 3.350.000 pesos propuesto por el Gobierno.

Sobre la reducción de los aportes parafiscales de las empresas, afirmó que los congresistas pedirán un presupuesto piso al Sena y el ICBF, que se introduciría en el presupuesto general de la Nación de cada año. Este monto mínimo, agregó, podría indexarse con el IPC más unos puntos adicionales, para garantizarle a las entidades su funcionamiento.

Por su parte, el senador Camilo Sánchez aseguró que la reforma no va a ser “pupitreada”, así tenga mensaje de urgencia, para no repetir la experiencia de la reforma a la justicia. “Se van a hacer foros nacionales, pues no hay afán en su aprobación. Como el Ejecutivo ha dicho que esta reforma no aumenta el recaudo, no se requiere que entre en vigencia el próximo 1º  de enero”, agregó.

Sánchez manifestó su extrañeza, pues las reformas tributarias nunca se presentan en el tercer año de Gobierno. Además, afirmó que presentar ponencia en menos de 15 días y aprobarla en menos de un mes y medio “es una locura”.

El IMAN

El abogado y contador Jesús Orlando Corredor, socio de Tributar Asesores SAS, afirmó que la creación del impuesto mínimo alternativo nacional (IMAN) incrementaría la tributación en la clase media en un 450 %. “En este país a nadie le aumentan el salario de esa manera. El IMAN es una buena medida, pero debe afinarse”, aseguró.

Además, para Corredor, la propuesta le envía un mensaje de no ahorro a las personas naturales, que perderían los beneficios tributarios en materia del impuesto sobre la renta por aportar a una cuenta AFC o a un fondo voluntario de pensiones.

El ex director de la DIAN Horacio Ayala aseguró que incluir en un proyecto de ley una variedad de estrategias anti evasión es una tarea prácticamente imposible.

Sobre la prima en la colocación de acciones, afirmó que le parece lógico, porque recibe el mismo tratamiento del capital y forma parte del costo solo para quien lo aporta. Además, se reconoce la esencia económica del negocio.

Finalmente, afirmó que el proyecto es una amenaza para la aplicación de las normas internacionales de información financiera (NIIF), pues mantiene vigentes las normas contables actuales por un periodo de tiempo.

Parafiscales y creación de empleo

Carlos Mario Sandoval, gerente senior de Ernst & Young Colombia, se mostró escéptico frente a la posibilidad de que los cambios en materia de parafiscales propuestos en la reforma redunden en la creación de empleo. “No le tengo mucha fe a que se logré una gran cantidad de puestos de trabajo por esa vía. Esa no es la solución”.

En su opinión, este no es un tema solo de números, sino social, pues hay que entender que no todas las empresas están en igualdad de condiciones para crear empleo. Así, el debate debe buscar que las empresas se sientan motivadas a alejarse de la informalidad, para volver a la formalidad.

Sandoval recordó cómo, desde las leyes 50 de 1990 y 789 del 2002, se buscó disminuir las altas tasas de desempleo del país. Sin embargo, a pesar de que esos índices oscilan entre uno y dos dígitos, el aumento de puestos de trabajo no ha sido considerable.

“Debemos tener reglas claras en Colombia para el ICBF, el Sena y el Ministerio del Trabajo en cuanto al manejo de esos recursos. Eso, aunado a reglas laborales y a un compromiso con las empresas, podría servir para encontrar ese propósito. De lo contrario, no le auguro un futuro positivo a esta iniciativa”.

Por su parte, Javier Díaz Molina, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores, sostuvo que los parafiscales no deberían estar a cargo de la nómina. En su opinión, si estos se disminuyen, se facilita la creación de empleo.

Díaz criticó el impuesto CREE, al que considera una nueva imposición tributaria que cambia las reglas de juego para los empresarios, no logra el fin que se busca y afecta la seguridad del inversionista. “Si lo miramos en términos de los ‘tres huevitos’, están volviendo tortilla el ‘huevito’ de la confianza inversionista”, recalcó.

Stefano Farné, director del Observatorio del Mercado Laboral del Departamento de Seguridad Social de la Universidad Externado, afirmó que la idea de bajar la parafiscalidad con el fin de generar empleo tiene una motivación clara, pero incierta. “Creo que el régimen de parafiscalidad hay que reformarlo, pero debe haber un consenso nacional sobre lo que vamos a hacer”, sostuvo.

Farné cuestionó la pretendida equidad del proyecto de reforma, pues, en su opinión, las modificaciones al régimen de parafiscales se compensarán a través de la clase media asalariada, por medio del impuesto de renta. Los trabajadores terminan pagando gran parte del impuesto, a través de menores salarios, como lo demuestra la experiencia internacional, indicó.

Además, según este especialista, no es cierto que el principal determinante de la informalidad sean los costos parafiscales. La informalidad, advirtió, se deriva de la falta de incentivos para la formalidad.

La abogada tributarita Catalina Hoyos comparte esa opinión. En su criterio, las reformas que se proponen no son la única forma de generar empleo.

Hoyos también se refirió a los cambios en el IVA incluidos en el proyecto, y destacó la simplificación de las tarifas y la disminución de la retención en la fuente al 15 %. “En materia de IVA tenemos que volver a armar toda la legislación. No sé si este sea el momento. Quizás sea la hora de pensar en un gravamen generalizado; pensar en exenciones sobre bienes de la canasta familiar, para darle progresividad”, indicó.