El silencio carece de significado si se le despoja de las circunstancias que lo acompañaron, esto es, del tiempo y modo en que se observó, señaló la Corte Suprema de Justicia. De esta forma, el silencio durante la relación laboral de aquello que se reclama en estrados judiciales no puede tenerse como conducta desprovista de la debida buena fe contractual, sin antes mediar el examen del contexto fáctico en el que se encuadra. El alto tribunal indicó que no se puede concluir que hubo conformidad con el salario pagado si se prueba que durante la relación laboral el actor no reclamó el reajuste salarial (M.P. Eduardo López Villegas).