La Sección Segunda del Consejo de Estado aclaró la postura de la corporación respecto a la prescripción cuando se discute el contrato realidad con la Administración. En efecto, indicó que los derechos pensionales (particularmente los relativos a los aportes al sistema de seguridad social) por su naturaleza son imprescriptibles. En ese orden, esta figura no puede aplicarse a los aportes a pensión que debe hacer el empleador en virtud de la irrenunciabilidad de los beneficios mínimos laborales, el in dubio pro operario, la igualdad y el principio de no regresividad en armonía con el mandato de progresividad (C. P. William Hernández Gómez).