Modernización, el reto de la administración de justicia

El uso de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) ha permeado casi todos los aspectos de la sociedad, por lo que las ramas del Poder Público se enfrentan a la necesidad de actualizar sus métodos de trabajo.

 

No hacerlo, teniendo en cuenta el actual contexto social, significaría un obstáculo adicional frente a la pretensión de los ciudadanos de contar con un aparato judicial cercano y eficaz.

 

Las experiencias internacionales reflejan el largo camino que queda por recorrer en el escenario colombiano. Una visión sobre este panorama se puede obtener del estudio publicado en mayo de este año por la Corporación Excelencia en la Justicia (CEJ) titulado E-Justicia. Experiencias internacionales y colombianas en el uso de las TIC para el mejoramiento de la administración de justicia, que presenta ejemplos de prácticas nacionales e internacionales que permiten profundas transformaciones culturales y funcionales en los sistemas judiciales y contribuyen a una justicia eficiente.

 

La justicia a un clic

Gloria Borrero, directora de la CEJ, señala que el proceso de implementación de nuevas tecnologías comenzó desde la década de los noventa, pero su desarrollo aún es insuficiente, entre otras razones, porque “la infraestructura tecnológica y los sistemas de información disponibles se han venido implementando de manera desarticulada”.

 

Quizás un acercamiento a esa necesaria articulación se encuentra en el Plan Nacional TIC 2008-2019, presentado en marzo del 2008 por el entonces Ministerio de Comunicaciones. Este contiene el Plan de Modernización Tecnológico de la Administración Judicial, cuya finalidad es que, a través de la apropiación de las TIC, se logre un ejercicio eficiente de la función judicial.

 

Paralelamente a la actualización de equipos y sistemas, es necesario involucrar el factor humano en esta evolución. Es así como, a título de ejemplo, el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones adelantó, el pasado 15 de julio, una jornada de capacitación con los presidentes de las altas cortes, magistrados auxiliares e integrantes de la Dirección Ejecutiva de la Administración de Justicia, como parte del proceso de apropiación de las TIC en la Rama Judicial.

 

En cuanto a los usuarios, Borrero considera que las oficinas de abogados o los independientes se adaptarán rápidamente a las ayudas tecnológicas, “aunque existirá un porcentaje reticente de la población de abogados que pertenecen a la vieja guardia o quienes tienen dificultades de acceso a internet”.

 

A lo anterior, agrega que un reto mayor se presenta en los trámites donde el ciudadano del común interactúa con la justicia sin la intermediación de un abogado, ya que existe una brecha digital en la población aún por superar.

 

Sobre este punto, Andrés Guzmán, abogado y gerente de Adalid Corp., anota que el verdadero uso de la tecnología es diseñar, desarrollar e implementar sistemas pensando en los usuarios de la justicia para su eficaz acceso a las piezas procesales en tiempo real. “Esto no es nuevo, en el mundo ya ha sido inventado, reinventado y complementado, con el fin de que la justicia esté a un ‘clic’ de los ciudadanos”.

 

Superar el rezago

Cuando el sistema de justicia esté totalmente interconectado y sea posible la gestión activa, generalizada y segura de contenidos de procesos y jurisprudencia, podrá decirse que las metas del Plan Nacional TIC 2008-2019, en cuanto al sector justicia se refiere, se han cumplido.

 

Esto se reflejará en la interacción de los abogados litigantes con los despachos judiciales, a través de una red judicial nacional para obtener seguridad jurídica, confidencialidad, veracidad y certeza procesal, ahorro de tiempo, reducción de costos, organización y transparencia procesal.

 

Por ahora, el primer paso para superar el rezago, en palabras de Guzmán, es diseñar el modelo que le servirá a Colombia en materia de justicia, por lo menos durante los próximos 20 años, en temas como el uso de la telefonía móvil 5G, la televisión satelital, firmas digitales, redes sociales, entre otras grandes herramientas que son el presente, pero “debemos diseñar pensando en el futuro y recuperar todo el tiempo perdido”.       

 

Finalmente, el manejo de expedientes electrónicos, por ejemplo, permitirá, entre otras cosas, conservar la memoria judicial del país, por lo que la modernización de la administración de justicia, más allá de herramientas tecnológicas para descongestionar despachos, representa un beneficio para toda la sociedad.

 

 

“Es imperioso que los litigantes se preparen en las nuevas tecnologías”

 

Édgar Carlos Sanabria, presidente de la Sala Administrativa del Consejo Superior de la Judicatura, dialogó con ÁMBITO JURÍDICO en torno a la modernización del aparato judicial y las acciones necesarias para este fin.

 

ÁMBITO JURÍDICO: ¿Cuál es el diagnóstico de la implementación de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) en la administración de justicia?

 

Édgar Sanabria: La incorporación del uso de las TIC en la administración de justicia requiere de importantes recursos presupuestales que permitan contar con infraestructura tecnológica de punta. Además, es necesario capacitar a los servidores judiciales, con el fin de lograr involucrarlos en su utilización.

 

Para esto, se diseñó el Plan Estratégico Tecnológico de la Rama Judicial, con la visión de tener un modelo tecnológico coherente, que contribuya decisivamente a que la prestación del servicio público de la justicia se realice en condiciones de accesibilidad, celeridad y excelencia, con altos índices de calidad y transparencia. Así, se busca agilizar los procesos judiciales, posibilitar la sistematización del funcionamiento de la Rama Judicial, descongestionar los despachos judiciales y acercar a los ciudadanos a la justicia. En ese propósito, el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones nos ha brindado asesoría.

 

Á. J.: ¿Los usuarios del sistema judicial están preparados para las nuevas tecnologías?

 

É. S.: La mayoría de los funcionarios y empleados judiciales están familiarizados con su uso e implementación, a través de la capacitación por la Escuela Judicial Rodrigo Lara Bonilla. Igualmente, es imperioso que los abogados litigantes y demás intervinientes se preparen en las nuevas tecnologías, para lo cual se están realizando teleconferencias.

 

Á. J.: ¿En qué va la aplicación dada a los artículos 53 al 64 de la Ley 1437 del 2011?

 

É. S.: La Unidad de Informática realizó los ajustes necesarios al módulo de notificaciones Citanet, adscrito al Sistema de Gestión Judicial y Documental Justicia XXI, y se incorporaron los procedimientos de envío de mensajes de datos, correo electrónico con documentos adjuntos, la demanda, anexos y/o providencias del proceso en cualquier etapa.

 

También, en la página web del Consejo de Estado y en el portal de la Rama Judicial, se crearon espacios para que los tribunales y juzgados administrativos que ingresaron al sistema de oralidad ingresen los estados electrónicos, edictos, cronograma de audiencias, procesos a despacho para sentencia, registro de notificaciones por correo electrónico y los traslados especiales y ordinarios.