La Cámara de Representantes estudiará la ponencia para segundo debate al proyecto de inteligencia y contrainteligencia radicado por el Gobierno. Dentro del pliego de modificaciones se pide un término máximo de un año para adecuar los manuales de inteligencia y se incluye un artículo para que las interceptaciones de comunicaciones requieran orden previa de la Fiscalía General de la Nación. Además, la información clasificada tendría un término máximo de reserva de 35 años, cuando se trate de información que ponga en riesgo las relaciones internacionales, esté relacionada con grupos al margen de la ley o atente contra la integridad personal de agentes o fuentes. Finalmente, la revelación de secretos por parte de particulares no sería una conducta punible.