La Corte Suprema de Argentina autorizó el pasado jueves la práctica de un aborto no punible programado en un hospital público de Buenos Aires, que había sido suspendido por la intervención judicial de una ONG antiabortista.

El aborto fue practicado en el hospital San Martín de La Plata (a 60 kilómetros de Buenos Aires) a una trabajadora sexual que denunció haber sido violada.

Inicialmente, los médicos del hospital se negaron a realizar el procedimiento, razón por la que debió intervenir el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires.

“En el servicio de ginecología del hospital, como en otros servicios, hay objetores de conciencia, pero todos los hospitales saben que hay que cumplir con el protocolo establecido para estos casos”, afirmó el director de hospitales del Ministerio de Salud provincial, Claudio Ortiz, en declaraciones a la agencia oficial Télam.

El aborto estaba programado para el martes en el hospital público Ramos Mejía, pero ese día, un fallo de una jueza impidió interrumpir el embarazo, a instancias del pedido de la ONG.

Sin embargo, la Corte Suprema decidió revocar la medida cautelar que había frenado la operación e instó a las autoridades de la capital argentina a garantizar su práctica.

El alto tribunal ratificó así una decisión que dio a conocer en marzo, en la que consideró no punible el aborto practicado a mujeres víctimas de violación.

En su fallo, la Corte exhortó a los poderes judiciales nacionales y provinciales a que “se abstengan de judicializar el acceso a los abortos no punibles”.

En Argentina solo se permitía practicar abortos a mujeres violadas que tuvieran trastornos mentales; en los demás casos, se debía contar con autorización de los jueces.

Con información de Univisión e Infobae.com