Jurisdicción contencioso administrativa puede controlar que los fallos disciplinarios no se aparten de una correcta apreciación probatoria (3:22 p.m.)

La jurisdicción contencioso administrativa puede verificar que la prueba recaudada en el trámite disciplinario se ajusta a las garantías disciplinarias y legales, como también puede controlar que los fallos disciplinarios no se aparten de una correcta apreciación probatoria. Así lo dijo el Consejo de Estado al confirmar la nulidad de las resoluciones de la Procuraduría General de la Nación, en las que se sancionó disciplinariamente al exministro de Transporte José Henrique Rozo, debido a las conciliaciones celebradas con la sociedad Dragados y Construcciones de Colombia y del Caribe (Dragacol). Según la Procuraduría, el funcionario era responsable de no haber efectuado la liquidación unilateral, lo que permitió la indeterminación por parte de la entidad de los valores a su favor y la contribución a que el contratista obtuviera beneficios económicos elevados. Para la Sección Segunda, no existió negligencia o descuido por parte del exfuncionario, pues para el momento en que se podía efectuar la liquidación unilateral, este no tenía la condición de jefe de esa cartera. Adicionalmente, no existió una indeterminación de los valores adeudados al contratista, pues mientras Rozo estaba en el cargo se elaboraron las actas de conciliación correspondientes. Por ello, concluyó que el perjuicio patrimonial por las conciliaciones surgió por actuaciones fuera de su mandato (C.P. Bertha Lucía Ramírez).