Sin la correspondiente sanción, el Gobierno devolvió al Congreso, por razones de inconveniencia, el proyecto de ley que pretende generar incentivos a la calidad, promoción del consumo y comercialización de panela, mieles vírgenes y sus derivados, así como la reconversión y formalización de los trapiches. Dentro de los argumentos, la Presidencia señala que si bien el objeto del proyecto se refiere a los pequeños y medianos productores, la definición contenida en el artículo 2° del texto sobre “Trapiches paneleros de economía campesina”, como aquellos con capacidad productiva igual o menor a una y media (1.5) toneladas, desconoce u omite a los medianos productores con capacidad productiva entre 1.5 y 3 toneladas de caña por hora. Por lo anterior, el Ejecutivo considera que no es conveniente orientar los incentivos a que se refiere el proyecto normativo de manera exclusiva hacia agentes de tan pequeña escala productiva, pues ello coarta los efectos que busca la iniciativa legal y limita de manera general el potencial agroindustrial de los productores de los principales departamentos donde se desarrolla la actividad panelera, como son los departamentos de Boyacá y Santander.