Con el fin de proteger los derechos fundamentales de las personas afectadas por la ola invernal, que prevalecen sobre los intereses patrimoniales particulares, las autoridades competentes podrán ocupar temporalmente terrenos de propiedad privada, inundarlos y desviar el cauce de los ríos, para evitar mayores tragedias por el actual fenómeno climático, acaba de establecer el Gobierno. En tales casos, quienes resulten afectados serán indemnizados, salvo que se acuerde con ellos contratos de comodato a título gratuito, agrega la Directiva Presidencial 27 del 6 de diciembre. Las entidades territoriales también podrán exhortar a los dueños de predios ubicados en cercanías de las rondas de los afluentes, para que permitan la construcción de obras necesarias para encauzar las aguas.