La Anla modificó las tarifas para el cobro de los servicios de evaluación y seguimiento de licencias, permisos, concesiones, autorizaciones y demás instrumentos de control y manejo ambiental. Esta modificación tiene cuatro frentes: (i) optimizar desde el punto de vista de la sostenibilidad financiera los cobros por seguimiento que hace la entidad; (ii) minería, se ajustaron los valores de acuerdo con la realidad de los procesos de evaluación, ya que hoy en día se requieren equipos robustos para realizar una evaluación integral de todos los componentes ambientales; (iii) el seguimiento de plaguicidas cambió a la Subdirección de Instrumentos, Permisos y Trámites Ambientales (SIPTA) en lo relacionado con posconsumo de estos, lo que reduce el costo del seguimiento para ese sector y (iv) envases y empaques (trámite nuevo), en el marco de la estrategia de economía circular, y debido a la implementación de pilotos en 2020 y la obligatoriedad para 2021, por ser un trámite nuevo se requerirán nuevos equipos y procesos de evaluación y seguimiento por parte de la Anla para ejecutar este ejercicio en oportunidad de tiempos. Adicionalmente, se incluyó el cobro de cambios menores, que es uno de los temas donde las empresas históricamente han venido usando los ajustes que le hacen a los proyectos y donde se ha evidenciado un incremento en los últimos años. Esta norma entró en vigencia el pasado 4 de enero.