El presidente Juan Manuel Santos sancionó la Ley 1575 (Ley General de Bomberos). La norma señala que en cada vigencia fiscal el Gobierno deberá apropiar del presupuesto de la Nación recursos, como mínimo, por $ 25.000 millones, que serán destinados a financiar proyectos de inversión en esta área. También, precisa que se podrán establecer tarifas especiales o exonerar del pago de impuestos municipales o distritales a las dependencias, talleres y lugares de entrenamiento de los cuerpos de bomberos. Agrega que esos mismos predios no serán sujetos de impuestos o gravámenes por parte de la Nación. En ese sentido, podrán ser exonerados del pago de los impuestos de industria y comercio, avisos y tableros; sobre vehículos automotores; valorización; estampillas e impuestos o contribuciones que se requieran para la celebración de contratos. Finalmente, no pagarán peajes.