La Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia decidió repartir nuevamente los procesos asignados al despacho del magistrado Jaime Arrubla Paucar, quien culminó su periodo constitucional hace más de un año. Se trata de una medida de descongestión que surge tras la imposibilidad de nombrar a un sucesor en propiedad, pues en las sucesivas votaciones de la sesión plenaria que se han adelantado durante los últimos 17 meses, ninguno de los candidatos ha obtenido el apoyo necesario para asumir el cargo. El acuerdo indica que los expedientes distribuidos entre los demás magistrados que integran la sala serán compensados gradualmente al nuevo ocupante de la plaza, una vez asuma funciones.