En vigencia de la Ley 27 de 1992, la administración podía realizar el nombramiento en provisionalidad de un empleado de carrera en otro cargo y este conservaba sus derechos, señaló el Consejo de Estado. Sin embargo, la Ley 443 de 1993 cambió esa situación al establecer que se produce el retiro de la carrera y la pérdida de los derechos de la misma cuando el empleado tome posesión de un cargo de carrera, libre nombramiento y remoción o de periodo sin haber cumplido con las formalidades legales. Esta modificación tiene justificación constitucional en que la escogencia de cargos obedece al mérito, de ahí que deba cumplirse con las formalidades que la ley exige para adquirir derechos de carrera, concluyó la corporación (C.P. Gustavo Eduardo Gómez Aranguren).