El contrato celebrado con extranjeros por la prestación de servicios es una de las pruebas para la procedencia de los impuestos descontables, puesto que en él se acostumbra a discriminar el IVA generado que será objeto de retención por parte del contratante. Así lo precisó el Consejo de Estado, al tiempo que aclaró que aunque el contrato es el medio legal idóneo para probar las operaciones con proveedores de servicios extranjeros, ello no le resta valor probatorio a la factura. Por lo tanto, las operaciones con no residentes o no domiciliados en Colombia que originen el derecho a reclamar impuestos descontables pueden soportarse en facturas que den certeza de dichas operaciones (C.P. Martha Teresa Briceño de Valencia).