Una providencia de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, que estudia un caso en virtud de la Ley 600 del 2000, indicó que la notificación personal de la sentencia siempre tiene que hacerse respecto del procesado privado de la libertad, el delegado de la Fiscalía General de la Nación y el representante del Ministerio Público. Así mismo, el alto tribunal aclaró que la publicación del edicto “nunca suple la notificación personal de aquellos que por ley deben enterarse de la decisión de esta manera”. Encuentre en el documento adjunto a esta nota las demás precisiones que la Sala Penal hizo entre los conceptos de citación y notificación (M. P. Luis Antonio Hernández).