Una nueva modalidad de fraude conocida como la “estafa de la falsa encomienda del extranjero” ha sido identificada por las autoridades. Esta práctica consiste en que delincuentes contactan a las víctimas asegurando que un familiar o amigo les ha enviado un paquete desde otro país, el cual estaría retenido por supuestos inconvenientes legales o tributarios. El objetivo es generar confianza para posteriormente solicitar pagos con el fin de liberar la encomienda.

Los estafadores logran suplantar identidades de personas cercanas a la víctima, utilizando información personal extraída de redes sociales o de bases de datos filtradas. Tras establecer contacto, inventan una historia sobre el envío, afirmando que se encuentra detenido en un aeropuerto. Acto seguido, simulan ser funcionarios de entidades oficiales como la Dian o la Policía Nacional, lo que aumenta la credibilidad del engaño. (Lea: Introducen agravante para quienes usen inteligencia artificial en suplantación de identidad)

A través de mensajes con tono urgente, los delincuentes exigen transferencias de dinero, bajo la excusa de liberar la encomienda o evitar sanciones legales. Las víctimas, confiadas y ante la aparente gravedad del asunto, pueden caer en la trampa si no verifican adecuadamente la información. Este tipo de fraude ha generado alertas por su creciente incidencia en redes sociales y plataformas de mensajería.

Para evitar ser víctima de este engaño, la Fiscalía General recomienda no realizar pagos sin confirmar los datos directamente con el supuesto remitente, evitar compartir información privada en redes sociales y desconfiar de mensajes que soliciten dinero con urgencia

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