Mediante la Resolución 33 del 2013 y como medida definitiva, la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) prohibió la producción, distribución y comercialización de toda máscara que, independientemente del material en que haya sido elaborada o se pretenda fabricar, no cuente con orificios adecuados para respirar y recubra totalmente la cabeza del usuario e instó a los consumidores a no adquirir este tipo de productos. La entidad aclara que no prohíbe el uso de máscaras, pero que sí alerta sobre los riesgos latentes de sofocación y asfixia que pueden sufrir si utilizan una que no posea un sistema adecuado de oxigenación o ventilación.