Teniendo en cuenta que el proceso monitorio es un proceso de cobro de obligaciones de mínima cuantía, en virtud del principio de universalidad previsto en la Ley 1116 del 2006, según el cual la totalidad de los bienes del deudor y todos sus acreedores quedan vinculados al proceso de insolvencia a partir de su iniciación, dicho proceso debe ser incorporado al proceso de reorganización, pues no ha sido expresamente exceptuado, indicó la Superintendencia de Sociedades. De acuerdo con lo previsto en el artículo 419 del Código General del Proceso, quien pretenda el pago de una obligación en dinero de naturaleza contractual, determinada y exigible, que sea de mínima cuantía, podrá promover proceso monitorio.