En reciente concepto, la Superintendencia Financiera recordó que, teniendo en cuenta el auge de las monedas virtuales (entre ellas el Bitcoin) y los problemas que han enfrentado las plataformas transaccionales en las que se cotizan y negocian, emitió las cartas circulares 29 del 2014 y 78 del 2016, a través de las cuales advirtió no solo a las entidades vigiladas sino al público en general acerca de los riesgos a los que se exponen cuando adquieren y transan con estos instrumentos que no están regulados ni respaldados por ninguna autoridad monetaria o activos físicos y cuya aceptación es muy limitada. Así mismo, las citadas disposiciones recuerdan a los entes vigilados que no están autorizados para custodiar, invertir, intermediar ni operar con estos instrumentos o permitir el uso de plataformas para que se realicen operaciones.