El giro de recursos que hacen las compañías de financiamiento comercial para el pago de bienes que serán entregados a terceros mediante contratos de leasing no está exento del gravamen a los movimientos financieros (GMF), recordó el Consejo de Estado. Si bien el contrato de leasing financiero es considerado una operación indirecta de crédito, entre la compañía de leasing y el distribuidor o comercializador de los bienes existe una operación comercial netamente instrumental, que surge luego del perfeccionamiento del contrato, es decir, no existe un desembolso directo de crédito a favor del comercializador ni de quien posteriormente se verá beneficiado (locatario). Así las cosas, la corporación negó la nulidad del Concepto 91749 del 2007 de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, por considerarlo acertado, al afirmar que la operación bajo análisis es un negocio jurídico de aprovisionamiento en el que hay un desembolso de recursos a favor de un tercero (C.P. Hugo Fernando Bastidas Bárcenas).