En circular del pasado 20 de diciembre, la Superintendencia de Sociedades reglamentó la presentación de estados financieros de fin de ejercicio a cargo de las sociedades admitidas a la promoción de un acuerdo de reestructuración o de reorganización o que estén adelantando un proceso concordatario, sin perjuicio de que, en cualquier momento, les solicite otro tipo de información financiera. Los reportes deberán estar certificados por el representante legal y el revisor fiscal, o el contador, para las firmas no obligadas a tener revisor, que responderán por las inexactitudes o errores. La entrega de información falsa podría configurar el delito de falsedad en documento privado, advierte el instructivo.