En segundo debate, la Cámara de Representantes aprobó el proyecto que busca proteger a los usuarios del servicio de transporte aéreo. La intención es lograr proporcionalidad en las penalidades cobradas por los cambios de fecha y hora en los tiquetes de rutas nacionales. Entre los cambios más importantes se destacan la posibilidad de que los usuarios puedan postergar la utilización del servicio en las mismas condiciones pactadas y teniendo en cuenta lo ya pagado, para lo cual deberán comunicar al proveedor del servicio con una anticipación no menor a ocho días calendario, los consumidores pagarían únicamente la diferencia tarifaria del servicio, en caso de existir. Lo dispuesto no aplicaría cuando se trate de tarifas promocionales. Frente al derecho de retracto para los tiquetes aéreos, se entendería pactado en favor del adquiriente del tiquete cuando sea ejercido a través de cualquier canal de atención del vendedor dentro de 48 horas corrientes siguientes a la operación de compra. Por último, se acordó que los tiquetes que no se usen en la fecha pactada tendrán vigencia de un año. Sin embargo, la empresa de transporte aéreo podría determinar unos costos administrativos.