Mercantil
Sancionan a cuatro firmas de ingeniería por cartelización en licitación de Invías
21 de Enero de 2015
Las empresas Incoequipos Ingeniería Construcción y Equipos, Gisaico, Estyma y Pavigas, al igual que varios de sus representantes legales, fueron sancionados por la Superintendencia de Industria y Comercio (Superindustria), por cartelización empresarial.
De acuerdo con la investigación, estas compañías incurrieron en colusión o acuerdo anticompetitivo en una licitación adelantada por el Invías para la repavimentación de la vía que comunica a los municipios de Yacuanquer, Consacá y Sandoná con Pasto (Nariño) (ver ¿Por qué perduran los carteles empresariales?).
La superintendencia encontró que las empresas oferentes acordaron que Gisaico S.A. sería el ganador del contrato, y desplegaron una estrategia anticompetitiva para presentar ofertas previamente concertadas que garantizaran dicha adjudicación, lo cual fue advertido por el Invías, entidad que declaró desierta la licitación pública.
Por estos hechos, Incoequipos deberá pagar una multa de 2.217 millones de pesos; Gisaico, 1.478 millones; Estyma, 1.118 millones y Pavigas, 1.112 millones. La sanción también recae sobre los directivos Luis Eduardo Ordóñez, quien deberá pagar 30 millones de pesos; Javier Fernando Rocha, 18 millones; Darío Alberto García, 43 millones, y Guillermo León Ángel, 26 millones.
Según cifras de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, las adquisiciones del sector público representan, en promedio, el 15 % del producto interno bruto de un país, lo que hace de la contratación pública un componente importante de la actividad económica, agregó la superintendencia.
“Las colusiones en licitaciones públicas afectan la competencia y el patrimonio del Estado, en la medida en que aumentan los precios de los bienes y servicios que este contrata para cumplir con sus funciones”, advirtió.
Vale la pena recordar que, el año pasado, la Superindustria formuló pliego de cargos por “cartelización” a varias empresas que, por medio de acuerdos, buscaban aumentar artificialmente el precio de sus productos. Tal fue el caso de las infracciones al régimen de libre competencia en las que incurrieron varias empresas de productoras de pañales y papeles suaves o tisú.
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