Cada empresa debe establecer una política de desconexión laboral

De acuerdo con lo previsto en la Ley 2191 del 2022, la desconexión laboral es un derecho que tienen los trabajadores a no tener contacto por cualquier medio para cuestiones laborales en horarios por fuera de la jornada laboral, así como en sus descansos o vacaciones.

El ejercicio de este derecho inicia una vez finalizada la jornada laboral y responderá a la naturaleza del cargo, es decir, su alcance dependerá en parte a la naturaleza de las funciones del trabajador, sin que ello pueda conllevar a que se desmejoren las garantías legales. (Lea: Arranca el 2022 con normas claras sobre desconexión laboral).

Por lo tanto, señaló el Ministerio del Trabajo, es importante que cada empresa se establezca una política de desconexión laboral que determine la forma en que el empleador va a garantizar el ejercicio de este derecho, dentro de la cual se incluyen lineamientos frente al uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones.

Procedimiento

Así mismo, debe incluir un procedimiento que determine los mecanismos y medios para que los trabajadores o servidores públicos puedan presentar quejas frente a la vulneración del derecho, a nombre propio o de manera anónima, con mecanismos de solución del conflicto y verificación del cumplimiento de los acuerdos alcanzados y de la cesación de la conducta.

Por lo tanto, todo trabajador cuenta con el derecho a no ser contactado para asuntos laborales durante sus periodos de descanso, es decir, corresponde al empleador garantizar el derecho a la desconexión laboral del trabajador cuando este está fuera de su jornada laboral o durante un permiso o vacaciones.

La interrupción de las vacaciones está sujeta a una serie de límites, siendo necesario que el empleador tenga en cuenta la naturaleza de la labor desarrollada por el trabajador, así como la política de desconexión laboral o la ocurrencia de una situación de fuerza mayor o caso fortuito. Antes de la expedición de la ley 2191, se dejaba al arbitrio del empleador establecer la justificación que permitía interrumpir las vacaciones de sus trabajadores.