La iniciativa fue aprobada en primer debate y ya cuenta con ponencia positiva para el segundo. El objetivo principal es incrementar la remuneración de los congresistas en el mismo porcentaje del salario mínimo y así contribuir, desde el Congreso de la República, con la austeridad en el gasto público y con la reducción del déficit fiscal y propender por reducir las brechas salariales existentes entre los servidores públicos del país. Con todo, la reforma constitucional solamente estará vigente por cuatro años, contados desde la promulgación del acto legislativo, en caso de que este llegue a aprobarse. La idea, en últimas, es lograr reducir el salario de los congresistas de 40 salarios mínimos en la actualidad a 32 salarios mínimos en el 2018. Será responsabilidad de la plenaria del Senado discutir la iniciativa en esta etapa legislativa.