El Ministerio de Agricultura determinó los procedimientos administrativos especiales de clarificación de la propiedad, delimitación o deslinde de tierras de la Nación, extinción del derecho de dominio, recuperación de baldíos indebidamente ocupados o apropiados y reversión de los adjudicados. En este último aspecto, a juicio del Gobierno, la reglamentación existente es insuficiente, por lo cual fija un sistema de seguimiento y evaluación que le permita al Incoder verificar permanentemente el cumplimiento de las obligaciones y condiciones requeridas por la ley. Así las cosas, la reversión procederá, por ejemplo, cuando el particular incumpla las obligaciones y condiciones bajo las cuales se produjo la cesión, como la prohibición de aportar a sociedades o comunidades terrenos adjudicados como baldíos, si con dicha extensión se consolidan propiedades que superen el tamaño máximo fijado para las unidades agrícolas familiares en el municipio correspondiente. De esta manera, se derogaron los decretos 2663 y 2665 de 1994; y los capítulos VIII, IX y X del Decreto 2664 de 1994.