General
Corte Suprema de Argentina ampara libertad para negarse a recibir transfusiones de sangre
08 de Junio de 2012
Tras ser baleado en un intento de hurto, Pablo Albarracín, un ciudadano argentino de 38 años, testigo de Jehová, cayó en un estado de coma. Y aunque los médicos indicaron que requería una transfusión urgente de sangre, su esposa, de la misma religión, se opuso al procedimiento.
El caso es por estos días motivo de polémica en Argentina, ya que la Corte Suprema ordenó respetar la voluntad de Albarracín, quien, antes del asalto, había expresado su rechazo a recibir transfusiones.
El padre de la víctima acudió ante el alto tribunal para pedir la nulidad de la decisión, pero este, en un fallo unánime, resolvió respetar la voluntad del paciente, quien presentó un severo cuadro anémico y fue sometido a varias intervenciones quirúrgicas, debido a hemorragias internas.
“La ley argentina reconoce a toda persona capaz mayor de edad la voluntad de disponer directivas anticipadas sobre su salud pudiendo consentir o rechazar determinados tratamientos médicos preventivos o paliativos y decisiones relativas a su salud', señala la decisión.
Como no existe constancia de que la víctima haya cambiado se voluntad, y que “hay que respetar el derecho del paciente”, concluyó la Corte.
Opina, Comenta