Anecdotario Político

Benjamín Ardila Duarte

La Misión Kemmerer, traída por el general Pedro Nel Ospina hace 90 años, y las constituciones de Colombia en 1945 y 1991 confiaron a la Contraloría General de la República llevar el libro de la “deuda pública externa” que López Pumarejo llamó la “deuda pública eterna”. Los contralores creen que es un problema de teneduría de libros y glosan hasta la compra de una Coca-Cola, pero nunca vetan los empréstitos que tienen endeudadas a varias generaciones.

Los mandatarios tienen mala memoria frente a las promesas de campaña. Casi nunca las cumplen. Y los exjefes de Estado también; Murillo Toro olvidaba en la tarde de la vida que había sido presidente. Abadía Méndez también. El portugués Oliveira Salazar, ya excluido, de pronto despertaba y quería firmar decretos. Y don Manuel Azaña, expresidente español, preguntaba, con angustia, el nombre del país que había gobernado.

La marsellesa fue compuesta por Rouget de Lisle en Estrasburgo como canto del Rhin para los defensores de la patria en peligro. Con bella ceremonia patriótica se trasladaron sus restos al Monumento de los Inválidos. Empero, el alcalde de Choisy-le-Roy, donde había sido sepultado antes, advirtió que en la fosa estaban las cenizas de una niña de 16 años en lugar del músico del patriotismo. Entregó el catafalco y allá moran los despojos de la joven, pero la placa anuncia la presencia recordatoria del francés más cantado y alabado desde la Revolución a la hora presente.

El estudio de la historia es una necesidad de la cultura nacional. En Francia, el académico Alain Decaux lanzó una alarma, porque no se enseña historia a los niños. Jesuitas y oratorianos desde el siglo XVII la implantaron. Después del Congreso de Viena, se confirmó su enseñanza en 1815. Guizot y Duruy, ministros e historiadores, le dieron docencia obligatoria. Jules Ferry impuso el Catecismo patriótico para dar cohesión a la nación. En Colombia, se nos vienen los 200 años de la Batalla de Boyacá y la niñez y la juventud requieren una explicación de los episodios nacionales que le dieron vida a la república.