La Corte Suprema de Justicia recordó que no es procedente estudiar las acciones de tutela contra sentencias, debido a que la Corte Constitucional declaró inexequible la norma que establecía esa posibilidad. Para la Sala Civil, solo puede estudiarse la providencia acusada de arbitraria y absurda cuando es una decisión judicial que resquebraja el ordenamiento jurídico. En esa medida, descartó que la acción de tutela sirva para recuperar oportunidades precluidas o remediar fallas de gestión procesal. La corporación decidió negar la tutela a quien pedía la protección de sus derechos por haberse declarado el desistimiento tácito del proceso ejecutivo, en aplicación de la Ley 1194 del 2008, pues la actora no controvirtió en su oportunidad ese pronunciamiento judicial (M.P. Edgardo Villamil Portilla).