Al manifestar que el procurador Alejandro Ordóñez viene empleando términos que descalifican a la Corte Constitucional, por su desacuerdo con la decisión de reconocer que las parejas homosexuales pueden constituir familia y establecer contratos civiles que solemnicen su unión (C-577 del 2011), el alto tribunal le pidió al jefe del Ministerio Público que respete y acate las decisiones de la corporación y le recordó que no está autorizado para desatenderlas. A su vez, lo invitó para que se dirija a la máxima instancia constitucional en términos de decoro, de acuerdo a la dignidad que ostenta como jefe del organismo de control. También precisó que reivindica la autonomía de jueces y autoridades administrativas para dar cumplimiento a sus determinaciones.