Con el propósito de atenuar el impacto que la emergencia invernal ha generado sobre los ingresos de los hogares afectados y evitar que caigan en situación de pobreza o indigencia, el Gobierno, bajo el estado de emergencia económica, social y ecológica, declarado el pasado 7 de diciembre (Decreto 4580/10), creó ayer la figura del empleo de emergencia para personas afectadas mayores de 18 años, que se dedicarán a actividades de rehabilitación y reconstrucción de áreas afectadas por esta tragedia. Los empleos serán temporales, sin exceder los seis meses; la persona devengará el salario mínimo legal vigente, proporcional al tiempo laborado, sin que exceda la jornada máxima legal o fracción de esta; la persona será afiliada a salud y a pensiones (los porcentajes de cotización serán del 4%, a cargo del empleador) y al sistema de riesgos profesionales y no habrá lugar al pago de aportes parafiscales. Las entidades nacionales y territoriales y los contratistas del Estado que ejecuten actividades de construcción de vivienda e infraestructura, mejora de áreas públicas y demás actividades conexas o complementarias que se requieran para la recuperación social, económica y ecológica de las zonas afectadas por el invierno deberán vincular preferencialmente a estas personas, advierte este nuevo decreto con fuerza ley.