La prima especial de servicios establecida en el Decreto 873 de 1992 para los generales y almirantes de la fuerza pública en servicio perdió vigencia el 7 de enero de 1993, fecha en que fue publicado el Decreto 10 de 1993, que derogó el anterior. Así lo aclaró el Consejo de Estado al explicar que los decretos expedidos por el Gobierno, antes del Decreto 10, para fijar los sueldos básicos del personal de las Fuerzas Militares, de la Policía Nacional y de los empleados públicos del Ministerio de Defensa Nacional no se refirieron expresamente a la prima especial para estos servidores. En esos decretos se consagró la asignación de una prima de dirección y las demás que devengaran los ministros del despacho con el fin de que existiera proporción entre la remuneración con el rango y responsabilidad. En esa medida, concluyó que no se desconocieron derechos adquiridos (C.P. Alfonso Vargas Rincón).