Los decretos que desarrollan leyes marco son decretos reglamentarios especiales, distintos de los reglamentarios ordinarios que se expiden en ejercicio de la potestad reglamentaria general sobre las leyes ordinarias. El Consejo de Estado señaló que el Decreto 1299 del 2006, que modificó aranceles, tarifas y demás disposiciones sobre el régimen de aduanas, es un decreto reglamentario especial, que no puede ser objeto de reglamentación principal, pues esa posibilidad opera exclusivamente respecto de la ley. Por esta razón, la Sección Cuarta negó que la Resolución 5455 del 2006, expedida por el Director General de la DIAN como instrucción técnica para ejecutar el Decreto 1299, correspondiera a un reglamento ordinario y negó su nulidad (C.P. Carmen Teresa Ortiz de Rodríguez).