Familiaridad entre el administrador y el contador de la copropiedad podría amenazar el ejercicio profesional

El Consejo Técnico de la Contaduría Pública resolvió una consulta relacionada con una propiedad horizontal en la que el administrador y la contadora son presuntamente compañeros permanentes, teniendo en cuenta el evidente trato entre ellos y las publicaciones que realizan en redes sociales, en las que se ven compartiendo celebraciones y viajes juntos.

La entidad indicó que la profesión contable se caracteriza por asumir la responsabilidad de actuar en interés público. Por lo tanto, la responsabilidad de un profesional de la contabilidad no consiste exclusivamente en satisfacer las necesidades de un determinado cliente o de la entidad para la que trabaja.

Así mismo, le corresponde al profesional de la contabilidad cumplir los principios fundamentales de integridad, objetividad, competencia y diligencia profesional. La objetividad representa la imparcialidad y actuación sin perjuicios en todos los asuntos que corresponden al campo de acción del contador público.

Ante la existencia de una amenaza en relación con la objetividad, el contador debe aplicar una salvaguarda para eliminar o reducir dicha amenaza a un nivel aceptable. Dentro de las salvaguardas están: retirarse del cargo, poner fin a la relación financiera o empresarial que origina la amenaza y comentar la situación entre los órganos de administración.

En cuanto a las amenazas que podrían presentarse para un contador público, según la consulta, la entidad recordó la familiaridad, que se refiere a ser responsable de la información financiera de la entidad para la que trabaja cuando un miembro de su familia inmediata o un familiar próximo, que trabaja para la entidad, toma las decisiones que afectan a la información financiera de la entidad.

Ahora bien, si el interesado considera que las actuaciones del contador han violado algún precepto legal o ha puesto en riesgo los intereses de la copropiedad, puede presentar queja formal, debidamente documentada, ante el la Junta Central de Contadores, organismo que ejerce inspección y vigilancia para garantizar que la contaduría pública se ejerza de conformidad con las normas legales.