Si el acto administrativo de ejecución que está viciado en su publicidad no produce efectos para el destinatario, pero de todas maneras se ejecuta o se lleva a efecto lo previsto en él, la situación no es consecuencia de un acto administrativo, sino el resultado de una operación administrativa que será ilegal por consistir en la ejecución de un acto que aun no puede producir efectos por haberse omitido la notificación o por haber sido indebidamente realizada, manifestó el Consejo de Estado. En el caso analizado, el demandante solicitó la nulidad de una resolución que impuso una multa por el incumplimiento de un contrato celebrado entre las partes y la condena al pago de un saldo pendiente, con fundamento en que el acto no fue notificado oportunamente, violando el derecho de defensa. El alto tribunal precisó que la causa por sí sola no puede prosperar, ya que la notificación es un presupuesto de eficacia final y, por lo tanto, los vicios en la publicidad nada tienen que ver con la existencia o validez del acto. En este caso, procedería la acción de reparación directa, si con la operación se causó algún daño (C.P. Jaime Orlando Santofimio Gamboa).