Las medidas cautelares que se imponen en los procesos de competencia desleal por violación de secretos industriales pueden recaer sobre bienes de personas que no estén vinculadas al proceso, porque su finalidad es proteger la libre competencia, independientemente de los títulos de dominio. La Corte Suprema de Justicia confirmó esa tesis de la Superintendencia de Industria y Comercio (Superindustria), al negar una tutela que fue promovida contra la entidad, porque decomisó unos bienes que no pertenecían al investigado. La Corte descartó que se hubiera violado el debido proceso. En su criterio, las decisiones de la Superindustria fueron razonables y obedecieron a un criterio que no puede ser cuestionado por el juez constitucional.(M. P. William Namén).