El Consejo de Estado indicó que mientras la razón social se refiere a la naturaleza, existencia y representación legal del comerciante en virtud de la inscripción o registro comercial de la sociedad o empresa en una cámara de comercio, el nombre comercial se refiere a la actividad del empresario, sobre el que se adquieren derechos exclusivos con su primer uso en el comercio. Por tal razón, concluyó que el nombre comercial es distinto de la razón social, si bien puede coincidir en su denominación. En ese sentido, explicó que el depósito del nombre comercial en la Superintendencia de Industria y Comercio solo constituye un indicio de prueba del uso real, efectivo y continuo (C.P. Marco Antonio Velilla Moreno).