En el caso de un daño derivado de la concurrencia de conductas, el juez debe graduar cuantitativamente la relación de causalidad y el monto de la lesión, con el fin de reducir la indemnización, recordó la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia. Así, el juzgador tiene que medir la incidencia causal de cada parte en la producción de la afectación, para lo cual goza de un amplio margen de discrecionalidad. No obstante, la decisión deberá tener en cuenta las circunstancias del caso y la evidencia proveniente de las pruebas allegadas, la cual solo podrá ser modificada si es arbitraria y subjetiva, advirtió la corporación (M. P. Jesús Vall de Rutén).