Las señales de tránsito, en general, indican la forma correcta como deben circular los usuarios de calles y carreteras, indicando las precauciones que debe tener en cuenta, las limitaciones que gobiernan el tramo de circulación y las informaciones necesarias de acuerdo a las condiciones específicas de la vía, recordó la Sección Tercera del Consejo de Estado. Por consiguiente, cuando la Administración omite su implementación y ello es la causa determinante de un accidente de tránsito, se configura una falla en el servicio, capaz de comprometer la responsabilidad patrimonial del Estado, advirtió el alto tribunal  (C.P. Hernán Andrade Rincón)