Primera condena por genocidio contra líderes de los jemeres rojos de Camboya

Prisión S21, centro de tortura de los jemeres rojos en Phnom Penh (Camboya)

 

 

Las Cámaras Extraordinarias en la Corte de Camboya (ECCC), auspiciadas por la ONU y Camboya para juzgar a los altos cargos de los jemeres rojos, condenaron a cadena perpetua a sus dos máximos líderes, culpables de genocidio y crímenes contra la humanidad dirigidos contra vietnamitas y la comunidad musulmana cham.

 

Se trata del ideólogo del régimen, Nuon Chea, de 92 años de edad, y del hermano número dos (Pol Pot era el hermano número uno) o jefe del Estado Kampuchea Democrática, Khieu Samphan, de 87 años de edad, quienes ya cumplían cadena perpetua desde el año 2014 por crímenes de lesa humanidad por la evacuación forzosa de la capital Phnom Penh, en abril de 1975.

 

Es la primera vez que un tribunal internacional reconoce como genocidio algunos de los crímenes cometidos por el movimiento dirigido por Pol Pot que aterrorizó a Camboya, pues teniendo en cuenta que la mayoría de las víctimas pertenecían al grupo étnico jemer, el mismo del régimen, los hechos no eran considerados como tal. Según la ONU, el genocidio busca la erradicación de un grupo nacional, étnico, racial o religioso, por lo que habían sido calificados solo como crímenes contra la humanidad.

 

Empresa criminal conjunta

 

El juez Nil Nonn resaltó que ambos personajes formaron parte de una empresa criminal conjunta que mató de hambre y trabajos forzados a unos dos millones de camboyanos y con la cual Pol Pot y sus acólitos pretendían establecer una sociedad atea y homogénea, suprimiendo todas las diferencias étnicas, nacionales, religiosas, raciales, de clase y culturales. Los jemeres rojos sembraron Camboya de fosas comunes y forzaron a la población a trabajar en un régimen de esclavitud, hasta que una invasión vietnamita puso fin al régimen en 1979.

 

Las ECCC concluyeron que los crímenes sí se cometieron contra los vietnamitas y los cham por su pertenencia a un grupo, lo que, analizando la legislación internacional con la camboyana, permitió determinar el genocidio. Como apoyo, durante el juicio se emitió un video en el que, en un discurso de 1978, Pol Pot aseguraba que no existía “una sola semilla” de vietnamitas en Camboya. Voceros de las víctimas cham, por su parte, manifestaron que les prohibieron profesar su religión, además de las ejecuciones en masa.

 

 

Ambos condenados fueron encontrados culpables de otra cantidad de crímenes, entre ellos, matrimonios forzosos, violaciones y vejaciones a budistas.

 

Este fallo se funde con una anterior sentencia que ya cumplían. A la fecha, solo se ha condenado a tres exjemeres rojos: Chea y Samphan y, en 2010, Kaing Guek Eav, conocido como Duch, quien dirigió el centro de torturas capitalino Tuol Sleng, abierto actualmente como museo en memoria de las víctimas, también paga cadena perpetua.

 

Aunque existen otros cuatro casos pendientes, el primer ministro camboyano, Hun Sen, exjemer rojo, se ha opuesto a la celebración de más juicios, con el argumento de que podría regresar el caos. Esta negativa del funcionario, quien está en el poder desde 1985, y el pasado mes de julio renovó su mandato sin oposición, ha generado críticas de organizaciones de derechos humanos.    

 

El dato histórico

 

Después de una cruenta guerra civil que duró cinco años, los camboyanos creían que por fin llegaría la paz a su pueblo, con la entrada a Phnom Pehn, capital de Camboya, de las fuerzas comunistas vencedoras: los jemeres rojos. Salían a la calles a aclamar a los nuevos líderes, sin importar los principios ideológicos y políticos del grupo que tomaría el poder a partir de ese momento.

 

Camboya había padecido una guerra civil desde 1970 hasta 1975, bajo el gobierno de Lon Nol, que, junto con el príncipe Sirik Matak, había sido designado por la embajada de EE UU en Phnom Pehn para derrocar al príncipe Sinahuk.

 

El nuevo régimen comunista que se estableció en Camboya en 1975, liderado por Pol Pot, dirigente máximo de los jemeres rojos, proclamó el inicio del año cero de la revolución y una serie de medidas para asegurar el cumplimiento de su objetivo: instaurar un comunismo radical. Dichas medidas se resumían básicamente en evacuar las ciudades, abolir los mercados y la moneda, secularizar a los monjes budistas, ejecutar a los líderes del régimen anterior, expulsar a la población vietnamita y enviar tropas a la frontera, especialmente a la frontera con Vietnam.

 

Las tropas comenzaron a evacuar hospitales, asilos y pagodas sin ningún respeto o consideración hacia ancianos, niños o enfermos. También suprimieron todas las formas de comunicación con el exterior. Esto ocasionó que el mundo se olvidara de la tragedia que cobraba vidas cada minuto. Limpiaron la ciudad de la literatura existente y todo el material impreso, sin importar su contenido, fue quemado. Además, los bancos fueron saqueados para quemar el dinero, pues querían acabar con el riel (moneda nacional).

 

El periodo de terror en Camboya durante el dominio de los jemeres rojos culminó en enero de 1979, con la entrada de las fuerzas de Vietnam­ a Phnom Pehn. El conflicto entre Camboya y Vietnam estuvo motivado, en parte, por reivindicaciones territoriales con profundas raíces históricas. La caída de Pol Pot no significó la paz. La guerra volvió a Camboya a partir de la entrada de las tropas vietnamitas a su territorio en 1979. Los jemeres rojos se reagruparon y crearon bases militares en las zonas fronterizas.

 

Camboya continuó con un conflicto estancado hasta 1985, año en que la llegada de Mijaíl Gorbachov al poder de la Unión Soviética abrió un nuevo camino para el país. En julio de 1985, Vietnam anunció la salida escalonada de sus soldados del territorio camboyano. En enero de 1990, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) planteó la formación de una entidad política superior para regir los destinos del país hasta la celebración de unas elecciones. El año siguiente, el acuerdo fue alcanzado.

 

Desvanecimiento definitivo

En 1992, la ONU desplegó una gran operación en Camboya y, finalmente, en 1993, semanas antes de las elecciones, los jemeres rojos abandonaron Phnom Pehn. Luego de las elecciones, se restableció el Reino de Camboya. Sin embargo, en 1997, tuvo lugar otro golpe de Estado contra el partido monárquico. Un año después, se convocó nuevamente a elecciones. El conflicto llegó a su fin en 1998, una vez que la estructura militar y política de los jemeres rojos se desvaneció definitivamente, debido, en gran parte, a la muerte de Pol Pot.

 

En 1997, el gobierno camboyano pidió ayuda a la ONU para el establecimiento de un tribunal que juzgara a los líderes de los jemeres rojos. La Asamblea Nacional, en el 2001, aprobó una ley que establecía la creación de las cámaras extraordinarias en las cortes de Camboya para perseguir crímenes durante el periodo de Kampuchea Democrática, como se conoció Camboya durante el régimen de los jemeres rojos.

Otros casos ante la ECCC

 

- Kaing Guek Eav, alias Duch, arrestado el 31 de julio del 2007. La Sala de la Corte Suprema lo condenó a cadena perpetua el 3 de febrero del 2012. La decisión es definitiva y no puede ser apelada.

 

- Leng Sary, alias Van, arrestado el 11 de diciembre del 2007. Los procedimientos contra Ieng Sary finalizaron el 14 de marzo del 2013, luego de su muerte el mismo día. Estaba juzgado por cargos de crímenes de lesa humanidad, violaciones graves a los convenios de Ginebra de 1949 y genocidio.

 

- Leng Thirith, alias Phea, arrestada el 11 de diciembre del 2007. Se consideró no apta para ser juzgada, fue puesta en libertad provisional el 16 de septiembre del 2012 y falleció el 22 de agosto del 2015.

 

- Meas Muth, inicialmente acusado el 3 de marzo del 2015. En diciembre de ese mismo año compareció personalmente ante el juez internacional de investigación conjunta y se le imputaron más delitos.

 

- Ao An, alias Ta An, fue acusado de homicidio premeditado y crímenes de lesa humanidad el 27 de marzo del 2015 y de presuntos delitos adicionales el 14 de marzo del 2016, incluido el genocidio. El 16 de diciembre del 2016 los jueces de investigación conjunta concluyeron la investigación judicial y el caso se archivó.

 

- Im Chaem, fue acusada estando ausente el 3 de marzo del 2015. El 18 de diciembre de ese mismo año los jueces de instrucción presentaron una notificación de conclusión de la investigación judicial. La sala de cuestiones preliminares conoce de una apelación presentada por el fiscal adjunto internacional contra la orden de cierre.

 

- Yim Tith, el 9 de diciembre del 2015 el juez de investigación conjunta internacional lo acusó por genocidio, crímenes de lesa humanidad, infracciones graves a los convenios de Ginebra de 1949 y violaciones al Código Penal de Camboya.

 

Fuentes: Cámaras Extraordinarias en los Tribunales de Camboya y El País (España).