Juan Carlos Cortés González: “Vamos por un desempleo que no supere el 8 %”

Uno de los viceministerios que ha tenido mayor protagonismo en los últimos meses es el liderado por Juan Carlos Cortés González. A su cargo se encuentra toda la política pública de empleo y pensiones.

 

La formalización laboral, la creación de empleo y la afiliación a seguridad social de trabajadores por días, taxistas y empleados domésticos fueron algunos temas que Cortés conversó con ÁMBITO JURÍDICO.

 

ÁMBITO JURÍDICO: ¿Cómo va el tema de formalización laboral en este Gobierno?

 

Juan Carlos Cortés: La formalización laboral, que nosotros denominamos “El trabajo como debe ser”, constituye uno de los pilares fundamentales de la política de empleo de este Gobierno, particularmente del Ministerio del Trabajo (Mintrabajo). Esta se basa en temas como la generación de más puestos de trabajo, en la que hemos laborado intensamente, al convertirnos en la economía de América Latina que más empleo ha creado en los últimos tres años (2.250.000 puestos). Adicionalmente, está la implementación de políticas activas y pasivas, como la reconstitución del Mintrabajo; el diálogo social; el aumento de la productividad laboral, enfocada en la capacitación y el bienestar; la intermediación laboral, a través del servicio público de empleo, y el fortalecimiento de los beneficios de la movilidad, en especial para apoyar a los migrantes mediante nuevos servicios.

 

Á. J.: Pero aún son crecientes las cifras de informalidad.

 

J. C. C.: La informalidad es un fenómeno multicausal, que impacta, particularmente, a Latinoamérica. Colombia empezó el 2010 con una tasa de informalidad del 68,2 % y se redujo, a nivel nacional, a un 64 %, y en las 13 áreas metropolitanas a un 49 %. Por supuesto, no estamos satisfechos con este avance, pues consideramos que debemos mejorar mucho más en el trabajo como debe ser. Y hay que atacar todas las causas, sobre todo institucionales, relacionadas con políticas públicas. En tal sentido, expedimos nuevas normas para estimular la formalidad laboral, redujimos costos para la contratación de personal, creamos la Ley del Primer Empleo e impulsamos una reforma tributaria (L. 1607/12), que exonera a empleadores del pago de salud y de algunos costos parafiscales. También estamos promoviendo un cambio de cultura para que reconozcamos que el trabajo como debe ser paga, conviene al empleador, al trabajador y a la sociedad.

 

Á. J.: ¿La afiliación de los trabajadores por días a seguridad social y cajas de compensación es otro de los componentes?

 

J. C. C.: Exacto. El Decreto 2616 del 2013, que facilita la afiliación a los subsistemas de pensiones, riesgos laborales y cajas de compensación para los trabajadores de tiempo parcial, empleados domésticos, trabajadores de tiendas, bares y restaurantes es otro de los componentes que ha tenido muy buena acogida. Llevamos dos meses de implementación. Hoy, tenemos 2.000 personas que se han formalizado. Ese decreto de cotización por días nos ha servido muchísimo, pues se enfoca en reducir costos y facilitar la vida de las personas. Recordemos que antes un trabajador de tiempo parcial debía pagar seguridad social sobre un salario mínimo y ahora se paga por semanas en proporción al tiempo laborado al mes.

 

Á. J.: ¿Qué balance presenta del primer año de afiliación de empleados de servicio doméstico al sistema de compensación familiar?

 

J. C. C.: En abril del año pasado, el Mintrabajo emitió el Decreto 721 del 2013, para reafirmar la obligación de vincular trabajadores domésticos a las cajas de compensación familiar. Es importante registrar que en diciembre del 2012, había 8.000 trabajadores domésticos afiliados a cajas de compensación. Hoy, cerca de 60.000 trabajadores disfrutan de esos beneficios.

 

Á. J.: ¿Y la vinculación de madres comunitarias?

 

J. C. C.: Desde febrero, 63.000 madres comunitarias se han vinculado a los operadores del programa de hogares comunitarios y tienen contrato laboral.

 

Á. J.: ¿Cómo se ha avanzado en la formalización laboral de los taxistas?

 

J. C. C.: Durante seis meses, hemos dialogado con los tres actores: conductores, propietarios y empresas. Inicialmente, hubo resistencias normales, pero, fundamentalmente, el Mintrabajo ha dicho que lo que nos interesa es dar un primer paso hacia la formalización, que consiste en la seguridad social para todos los conductores de taxi. Son cerca de 850.000 conductores los que se beneficiarían. Es inadmisible que una persona que ejerce una actividad de alto riesgo no esté afiliada a riesgos laborales.

 

Á. J.: ¿Cuándo se expedirá ese decreto?

 

J. C. C.: Ya llegamos a un acuerdo final, y el decreto se encuentra en trámites de firmas. Esperamos que en el mes de junio esté lista la normativa.

 

Á. J.: ¿Qué otra población tienen en mente para empezar a formalizar?

 

J. C. C.: Estamos trabajando con tenderos y gremios de la construcción y de la confección. Por otro lado, con el Ministerio de Agricultura, venimos buscando fórmulas para que los trabajadores del sector agropecuario se puedan afiliar al sistema de riesgos laborales, mantengan su afiliación al régimen subsidiado de salud y ahorren en beneficios económicos periódicos (BEP) para su vejez. Este es uno de los sectores tradicionalmente marcado por una elevada tasa de informalidad, que ronda el 90 %, de un total de 3.200.000 trabajadores, que ganan menos de un salario mínimo. Estamos avanzando en ese tema y esperamos, para inicios del segundo semestre, definir un esquema institucional que facilite la formalización de esta media Colombia trabajadora que ha estado por fuera de la protección social.

 

Á. J.: ¿Qué opinión le merece el trámite del proyecto de ley sobre último empleo?

 

J. C. C.: El Mintrabajo ve con buenos ojos esta ley que cursa en el Congreso. El tema es cómo estimular la creación de empleo. Hemos venido acompañando los avances y desarrollos de la Ley del Primer Empleo (L. 1429/10) y estamos interesados en apoyar ese tipo de iniciativas, que son políticas activas y de estímulos para la generación de empleo. Ahora bien, preferimos llamarla ley de promoción de empleo para personas con más edad y experiencia. Así mismo, estamos aunando nuestros esfuerzos para que no solo a nivel nacional, sino también territorial, todos los departamentos del país incorporen en los planes locales el tema del empleo. Ya hemos involucrado a 26 departamentos.

 

Á. J.: ¿Qué pasó con la reforma pensional?

 

J. C. C.: El Gobierno tomó la decisión de implementar diversos cambios en esta materia. Así, se ha comprometido con tres frentes en materia de protección a la vejez: desarrollo de los BEP, el fortalecimiento del programa Colombia Mayor y la pensión familiar. En cuanto al primero, se trata de una figura creada en el 2005, que estaba olvidada y que este Gobierno revivió, a través de normas que garantizan su funcionamiento. Esta es una alternativa de ahorro para la vejez de aquellas personas que tiene capacidad limitada de cotizar.

 

Á. J.: ¿Cuántas personas se encuentran afiliadas?

 

J. C. C.: A la fecha, tenemos 2.000 vinculados a los BEP. Seguramente, en el segundo semestre, podremos divulgar masivamente este mecanismo, que impactará a muchos informales.

 

Á. J.: ¿En Colombia Mayor se amplió la cobertura?

 

J. C. C.: Hemos crecido en 800.000 cupos y nos comprometimos con la universalización del programa. En el 2010, había 450.000 cupos, y este año tenemos más de 1.250.000 colombianos protegidos. La meta es de 1.500.000 para el 2014. Es una protección para quienes nunca cotizaron, tienen edad avanzada y están en situación de pobreza.

 

Á. J.: ¿Y cuándo arrancará la pensión familiar?

 

J. C. C.: El Gobierno ya avanzó en la reglamentación y estamos trabajando en la operatividad. Tenemos un cronograma que nos permitirá, hacia el mes de julio, hacer una divulgación más masiva, para que operativamente quede todo listo para su implementación en los fondos y Colpensiones.

 

Á. J.: ¿Descartado un aumento de edad de pensión?

 

J. C. C.: La edad de pensión ya fue actualizada por la Ley 797 del 2003. Este tema no está en la agenda prioritaria de discusión. Hemos avanzado en un sistema integral de protección a la vejez, pero somos conscientes de que hay mucho por mejorar. Lo que decidimos fue convocar un gran pacto social por la vejez, que arrancó el 12 de mayo, para que todos los actores nos pongamos de acuerdo en los puntos centrales que debe tener este sistema de protección en Colombia y, a partir de esas conclusiones, analizar en el segundo semestre qué aspectos se deben reformar en el sistema de pensiones, bajo tres objetivos principales: ampliar cobertura, reducir inequidad y garantizar sostenibilidad.

 

Á. J.: En una eventual reelección del presidente Santos, ¿qué pasará con el empleo?

 

J. C. C.: Para el próximo periodo presidencial, los temas o retos son muy claros: primero, el país debe reafirmar su compromiso con el empleo. Este Gobierno, al reconstituir el Mintrabajo y darle el estatus que se merece, ha demostrado que una sociedad no puede fundar sus esperanzas solo en crecer económicamente, pues debe hacerlo con equidad, y la mejor forma es generar empleo de calidad. Más de un millón y medio de los nuevos empleos están cubiertos por prestaciones sociales y seguridad social, lo que significa que se ha creado empleo de calidad. Así mismo, es importante reordenar el sistema de protección a la vejez y, obviamente, hay unas metas con programas específicos en ámbitos como la formalización laboral y la capacitación. También debemos avanzar en nuevas coberturas.

 

Á. J.: ¿Cuál es una cifra de desempleo “ideal”?

 

J. C. C.: El desempleo natural de nuestra economía es una cifra en la que no se han puesto de acuerdo los especialistas. Lo cierto es que hay que mantenerla en un dígito. Vamos por un desempleo que no supere el 8 % y por la afiliación a seguridad social de todos los trabajadores en Colombia.