Alemania les ofrecerá a los padres tres opciones para completar el certificado de nacimiento de sus hijos, en lo relacionado con el sexo: masculino, femenino o intersexual o sexo indefinido.

La medida permite dejar en blanco la casilla de género, para aquellos bebés nacidos físicamente con ambos sexos.

Así lo establece una ley aprobada en mayo pasado por el Gobierno, que entrará en vigor el próximo 1º de noviembre.

La nueva legislación brinda la posibilidad de que, más adelante, en la edad adulta, las personas con sexo indeterminado puedan escoger si quieren estar bajo la categoría masculina o femenina. Además, se ofrece la opción de quedarse bajo la categoría del tercer género o indeterminado.

La norma se apoya en una decisión de la Corte Constitucional según la cual, mientras una persona “sienta profundamente que pertenece a un cierto género, tiene también el derecho de escoger cómo se identifica legalmente”.

Un año antes, una activista intersexual había denunciado ante la ONU que las personas sin sexo definido eran forzadas a operarse, sobre todo a edad temprana, para acabar con esa peculiaridad física. 

El Consejo Alemán de Ética (un gremio independiente de expertos que asesora al Gobierno y el Parlamento) aconsejó reconocer y proteger los derechos de las personas sin sexo definido.

Hace seis semanas, Australia también aprobó una legislación sobre el tercer género, aunque, desde el 2011, les permite a sus ciudadanos marcar con una X la casilla de género en el pasaporte, tal como ocurre en Nueva Zelanda desde 2012.

(Con información de ABC.es y BBC)