Como una afrenta a la propia Corte Constitucional calificó el magistrado Alberto Rojas las declaraciones de Nilson Pinilla, en torno al supuesto “amiguismo” que ha marcado sus actuaciones y las del actual vicepresidente de la corporación, Jorge Ignacio Pretelt. El jurista calificó de completamente infundadas y tendenciosas estas insinuaciones, pues, dice, sus actuaciones no obedecen al pago de favores políticos, como cree que quiere darlo a entender Pinilla, sino a criterios jurídicos, basados en interpretaciones de la ley y la Constitución. Aunque en este debate han intervenido públicamente los tres juristas mencionados, hasta el momento, el Presidente de la Corte Constitucional, que se encuentra fuera del país, no se ha pronunciado sobre la posición oficial de la alta corporación.