Entre 4 y 10 horas semanales dedicarían los estudiantes de escuelas y colegios oficiales en la jornada escolar complementaria que se discute en la plenaria de la Cámara de Representantes, en segundo debate. Se trata de una propuesta para crear un periodo de actividades académicas, sociales, culturales y deportivas en tiempos distintos a los de la jornada escolar, que tiene como objetivo principal el aprovechamiento del tiempo de los estudiantes y la reducción de la deserción escolar. Algunas de las alternativas pedagógicas se refieren a temas ambientales, deportivos, artísticos y culturales.