La Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada fijó el protocolo de cumplimiento para todos los servicios de vigilancia y seguridad privada que laboren en las instituciones educativas públicas y privadas de educación preescolar, básica, media y superior, mediante la implementación de las modalidades de vigilancia fija y móvil, con medio canino y tecnológico. Así, enlistó los deberes que el vigilante debe tener en cuenta al momento de prestar el servicio, algunos de ellos son contribuir a la prevención del delito; asumir actitudes disuasivas o de alerta cuando observen la comisión de actos delictivos en los alrededores del lugar donde se encuentra y conocer y respetar la prevalencia de los derechos de niños y adolescentes y su protección integral. También señaló las condiciones generales que debe incluir el proceso de selección en la empresa y/o cooperativa de vigilancia y seguridad para la contratación del personal, en este punto precisa que las empresas pueden incluir prueba de polígrafo para determinar el grado de confiabilidad y descartar temas como participación en ilícitos, vinculación con grupos al margen de la ley, consumo de alcohol y/o sustancias sicotrópicas, entre otras. Para la aplicación del examen sicofisiológico de polígrafo deberá existir autorización escrita, previa y voluntaria del examinado.