El Consejo de Estado, en sentencia del pasado 5 de junio, negó la nulidad de la elección para el periodo 2010-2014 de la contralora general de la República, Sandra Morelli. El accionante alegaba que Morelli no cumplía el requisito de haber ejercido cargo público durante, al menos, cinco años. Sin embargo, el alto tribunal advirtió que esto no puede confundirse con la función pública, pues esta se puede desempeñar sin ostentar un empleo público, mientras que el cargo requiere una relación subjetiva con el Estado. De esa forma, la ley exige el desempeño de la función pública, el cual fue demostrado por la contralora al haber sido árbitro. Además, frente al incumplimiento del término de la citación para la elección, la Sección Quinta indicó que no fue una irregularidad sustancial, pues los voceros de las bancadas señalaron que tuvieron tiempo para deliberar y tomar la decisión. En cuanto a la ausencia de votación secreta, aseveró que las bancadas pueden ordenar a sus miembros la manera de votar y, en este caso, estas acordaron votar públicamente (C.P. Alberto Yepes).