En sentencia que acaba de ser publicada, la Corte Constitucional expresó que los accidentes de trabajo que generan una desmejora en el estado de salud del empleado ameritan la concesión de la estabilidad laboral reforzada, aun cuando no se tenga certeza de la calificación porcentual de la invalidez. Esta condición desfavorable, dice la corporación, convierte al trabajador en sujeto de especial protección constitucional, por lo que el empleador debe recurrir a soluciones alternativas distintas al despido, que le garanticen continuidad en el empleo y que supongan su inclusión. Así, subraya el alto tribunal, se deben explorar soluciones como la reubicación y respectiva orientación y capacitación en el nuevo lugar de trabajo, pero no se pueden exponer argumentos legales de desvinculación, como el despido sin justa causa. De no ser posible poner en práctica tales alternativas, es imperativo solicitar autorización previa a la Oficina del Trabajo y realizar el pago de indemnización respectiva (M. P. Mauricio González).